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¡Viva la Virgen del Rocío Coronada!

 

Crónica de la Coronación Canónica de la Novia de Málaga, ¡La Reina de la Victoria!, ¡La Emperatriz de las Lagunillas! Málaga se vistió de blanco el 12 de Septiembre para recibir a su Novia Coronada.

 

 

Se cumplen hoy 9 días del que fue el acontecimiento cofrade del año en Málaga, Andalucía e incluso podríamos decir, de España.

 

Procesión de Ida (Traslado a la SICB)

El 11 de Septiembre a las 20:30, con algo de retraso, se ponía en la calle la cruz parroquial que abría el cortejo de cirios camino de la catedral con motivo de la coronación de la Virgen del Rocío.

La emoción se respiraba a las puertas de la Casa de Hermandad. Una abarrotada Plaza de S. Marcelino Champagnat esperaba ansiosa la salida de la Novia de Málaga con la caída del Sol.

El momento llegó tras más de 3 años de preparación y espera. El trono, ligeramente reformado (los arbotantes fueron remplazados por los de Mª Santísima de Gracia, de la vecina cofradía del Rescate), para su entrada en la catedral, cruzó el dintel de la puerta en torno a las 21:15 de la noche.

A la salida, minutos de aplausos, vítores e incluso fuegos artificiales demostraron una vez más la devoción del Barrio de la Victoria y de Málaga entera hacia la Virgen del Rocío.

Iba vestida como lo hacía últimamente el Martes Santo, y, como estreno, el manto de coronación diseñado en 2012 por Eloy Téllez y ejecutado por los talleres de Felicitación Gaviero, que lució tanto en la procesión de ida como en la de vuelta.

La Banda Musical de la Paz acompañó a la virgen en ambos desfiles demostrando una vez más su impecable ejecución y profesionalidad.

El centro histórico de la ciudad recibía engalanado la llegada de la Reina de la Victoria, creando un ambiente total de tarde noche de Semana Santa.

La llegada a la catedral se produjo en hora, sobre las 23 horas. Sin duda, fue un momento especial, mágico. La Plaza de los Naranjos en silencio observaba como los portadores, concentrados, lograban encerrar milimétricamente el trono en la SICB, después de retirar algunos faroles de los arbotantes del trono.

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

Anecdótica Saeta

El sevillano saetero Manuel Cuevas cantó una saeta a la salida de la catedral, que a pesar de confundir el barrio de la Victoria con el de la Trinidad, interpretó con total perfección.

 

Mientras la tarde avanzaba, la Virgen recorría el centro de su ciudad, donde no faltaron petaladas, saetas, sevillanas, malagueñas, etc. Cabe destacar el momento en el que cruzó el arco en la Plaza del Sigo, regalo de la Cofradía del Monte Calvario, las interminables petaladas en Calle Mesón de Vélez, donde el citado saetero deleitó al público con otra obra.

La noche avanzaba pero los malagueños aguantaban. “¡Viva la Virgen del Rocío Coronada!” era sin duda la frase más aclamada.

Como puntos a destacar; la Tribuna de los Pobres, el encuentro con la Virgen de la Paloma,  los cantores de Híspalis en la CH del Rico, etc. La Virgen del Rocío llegó a su barrio a las 5:30 de la madrugada del Domingo, donde la esperaban cientos de victorianos. La subida de la Victoria concluía con el amanecer. Finalmente, tras 14 horas de procesión la virgen del Rocío se encerraba en su CH, con los rayos del sol, a las 8 y media de la mañana. Una jornada histórica que quedará sin duda, para el recuerdo de los malagueños.

Para completar los actos, el traslado a San Lázaro, el Domingo por la noche, los 3 prorrogados días de triduo extraordinarios y la misa de acción de gracias del Domingo 20 de Septiembre, donde se dieron finalizados los actos de la coronación.

 

Nada queda por añadir, más que ¡Viva la Virgen del Rocío!

La Coronación

El Sábado amanecía nublado, el gran día había llegado. A las 12:00 comenzó la misa de coronación en el interior de la Catedral de la Encarnación. La virgen del Rocío la presidia en el baldaquino del altar mayo ya vestida con la nueva saya bordada, manto de camarín, mantilla, media luna y numerosos estrenos y regalos con motivo de la efeméride.

 

La misa cantada, oficiada por el obispo de la diócesis, Jesús Catalá transcurría con normalidad. Ahora sí llegaba el momento más esperado. Los padrinos de la coronación; El Excmo. Ayto. de Málaga y la Hermandad Matriz de Almonte, representados por el alcalde y el hermano mayor, respectivamente, entregaban el halo de coronación al obispo, que fue el encargado junto con el Hermano Mayor de la Cofradía del Rocío de coronar, propiamente dicho, a la Virgen del Rocío.

La catedral aplaudía sin parar, repicaban las campanas, fuegos artificiales y cohetes sonaban en el exterior. La misa, de una duración de 2 horas terminó a las 14 horas.

 

Procesión Triunfal

A las seis de la tarde Málaga se volcó de nuevo con su novia ya coronada. Se abrieron las puertas y un extenso cortejo formado por representaciones de todas las cofradías de Málaga capital y provincia, además del Ayuntamiento, la Hermandad del Rocío de Almonte, distintas personalidades y el cuerpo de cirios se puso en la calle. La virgen salía bajo una lluvia de pétalos blancos, la marcha “Rocío Coronada” se estrenó interpretada de nuevo por la BM. La Paz.

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